
El nuevo ministro de Justicia de Brasil, Sérgio Moro, prometió ayer ampliar su cruzada anticorrupción, iniciada como juez de la Operación Lava Jato, que llevó a la cárcel a decenas de políticos y empresarios de primer plano.
El combate contra la corrupción, contra el crimen organizado y contra los crímenes violentos son las tres prioridades de su agenda, dijo el exmagistrado de Curitiba (sur) al asumir el cargo. “No se combate la corrupción solamente con investigaciones y condenas eficaces”, afirmó, al explicar por qué aceptó ser parte del gobierno del presidente Jair Bolsonaro. “Se necesitan políticas más generales contra la corrupción (...)”, declaró Moro. (I)