La Perla del Pacífico extendió nuevamente su brazo hacia Samborondón, en mayo pasado, en un intento de conectar aún más a estos cantones cuyos habitantes mantienen un contacto vial constante y fluido.

Este ‘abrazo de concreto’, que conecta el norte de Guayaquil con el corazón de Samborondón, fue una de las obras más significativas durante este año que termina en el Puerto Principal, puesto que su implementación persigue aliviar el embotellamiento que era característico en el Puente de la Unidad Nacional en horas de mayor tránsito vehicular.

Este puente de 780 metros se suma a una serie de nuevos eventos que se realizaron en Guayaquil por primera vez y que la marcaron positivamente durante este 2018, evidenciando que la urbe puede ser escenario de citas a la altura de las grandes ciudades. Una confirmación de ello son los premios que adquiere la Perla del Pacífico a nivel internacional y la cantidad de turistas que la visitan. (I)